Acabamos de estrenar el año, apenas han pasado unos días de este mes de enero. 2020, viene con fuerza, invita a la transformación y a la renovación. Atentos al próximo post que publicaremos en del blog, en el que hablaré sobre la energía de este año 2020.
Y desde ya mismo, en Spiral Áurea, ponemos en marcha un proyecto que nos parece muy interesante. Cada mes hablaremos de una piedra, de un mineral, de un cristal. Si sientes y vibras con alguna, te invitamos a que trabajes con ellas.
Comenzamos hablando de una piedra que no es de las más conocidas: la charoita. Es una piedra de transformación y de sanación. Ayuda a afrontar los miedos y a transformarlos con sutilidad y mucho amor.
La charoita, junto con otras piedras de las que iremos hablando, pertenecen al grupo de piedras denominadas “de la Nueva Era” con un nivel vibracional muy elevado que están aquí para ayudarnos a trabajar y a evolucionar hacia una mayor conciencia y evolución, y hacia el cambio vibracional al que se encamina la Humanidad en esta era de Acuario.
Son fáciles de distinguir por su color característico o principal que es el lila o malva (que las diferencia del color morado de las amatistas), el cual aparece entremezclado con otros tonos como el verde, el blanco nacarado, el negro o el marrón. Se relaciona con el cuarto chakra y con los chakras superiores. Los chakras del corazón y los espirituales, la charoita integra la energía más elevada en nuestro corazón.
Las charoitas que he visto y con las que he trabajado son de tamaño pequeño, cantos rodados, perfectos para llevarlos en la mano, en un bolsillo, ponerlos debajo de la almohada, etc. A pesar de su tamaño, su energía es amorosamente potente.
Puedes trabajar con ellas en meditación, llevándolas contigo, sintiéndolas junto a tí. Te ayudarán tanto si deseas eliminar y sanar heridas emocionales: pérdidas, duelos, rupturas, los miedos que no te dejan avanzar, como también a conectar con el amor incondicional. Te acompañarán en los cambios importantes de tu vida ya sean a nivel evolutivo y de transformación personal.
Todo cambio exterior comienza por el interior. ¿Qué deseas cambiar?. Tal vez sea un hábito, una creencia, o perder el miedo ante un hito o evento importante como cambiar de trabajo, cambiar de casa, superar una pérdida o ruptura, etc. La charoita te ayuda a sentirte más conectado contigo mismo de manera amorosa.
¿Cómo trabajar con una charoita?
Ponla en tu mano. Conecta con ella. Siente su energía.
Puedes hacer una pequeña meditación. Piensa, siendo lo más objetivo posible, qué aspectos funcionan en tu vida, qué va bien, qué te nutre, qué te motiva, qué te hace amar, qué te conmueve, qué deseas y anhelas, qué tienes a tu favor, dónde están los obstáculos y los retos a afrontar, qué dolor y heridas emocionales quieres trabajar, que miedos bloquean esos cambios que son necesarios para evolucionar.
¿Solo hay que iniciar un cambio cuando algo no funciona en tu vida?. No. También puedes trabajarlo porque deseas conocerte mejor, ser más consciente, tener ganas de superar retos…
Toda transformación, se inicia con un movimiento interior que puede generar cierta inquietud, incomodidad e incluso momentos de estrés y angustia. Miedos. No siempre resulta fácil mirar hacia dentro, qué cambiar, qué mover, mirar las sombras, el lado oscuro. No te centres solo en tus miedos, observa también cuáles son tus puntos fuertes, dónde reside tu fuerza y cuáles son tus cualidades, serán tu apoyo para dejarlos a un lado y evolucionar.
Confía en tí, en tu intuición, en tu corazón. Escúchate y adelante.